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El poder del lenguaje inclusivo en empresas

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El lenguaje es un elemento subestimado pero poderoso que tiene un impacto profundo en cómo percibimos la realidad y en cómo nos relacionamos en la sociedad. En este artículo, exploraremos el impacto del lenguaje y cómo las empresas pueden adoptar un lenguaje más inclusivo para promover la igualdad de género.

¿Tiene importancia el uso del lenguaje inclusivo? El impacto del lenguaje en la cultura empresarial

Hoy en día, las empresas otorgan una gran importancia a un elemento que influye significativamente en sus resultados: la construcción y el mantenimiento de su imagen corporativa. Esta imagen está relacionada con cómo la compañía es percibida, basándose en las opiniones y apreciaciones que las personas forman a partir de diversas fuentes, como medios de comunicación, redes sociales, experiencias con la clientela, observaciones de empresas competidoras y, no menos importante, la propia percepción interna de la organización.

En los últimos años, la preocupación por la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres ha ganado un lugar destacado en la sociedad y, por ende, en las organizaciones laborales. La implicación en esta causa va más allá de una mera expresión de principios; requiere que las empresas desarrollen y mantengan una imagen que refleje sus compromisos. En este sentido, es fundamental evitar el uso de un lenguaje y de imágenes sexistas o discriminatorios. Al hacerlo, las empresas no solo demuestran su compromiso con la igualdad de género, sino que también contribuyen activamente a la construcción de una sociedad más equitativa y moderna, capaz de satisfacer las necesidades cambiantes del mercado y del público en general.

El lenguaje inclusivo y no sexista se posiciona como una herramienta esencial en los Planes de Igualdad. Su uso no es una novedad, ya que ha sido recomendado y regulado durante décadas por diversas instancias legales, tanto a nivel comunitario, nacional como autonómico.

Regulaciones legales:

El Parlamento Europeo, por ejemplo, destacó en un informe del 13 de febrero de 2008 que el uso de un lenguaje no sexista trasciende la mera corrección política, ya que influye significativamente en las actitudes, comportamientos y percepciones de las personas. La Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, también aborda estas cuestiones en su articulado, subrayando la importancia de la implementación de un lenguaje no sexista en el ámbito administrativo y en todas las relaciones sociales, culturales y artísticas, así como en los proyectos relacionados con las tecnologías de la información y la comunicación financiados con fondos públicos.

La inclusión de un lenguaje inclusivo y no sexista en la comunicación de una empresa no solo es una cuestión de cumplimiento normativo, sino una muestra tangible de su compromiso con la igualdad de género y una contribución activa a la construcción de una sociedad más equitativa.

Si quieres saber más sobre las normativas y legislaciones pincha aquí.

El Impacto del lenguaje en la realidad:

El lenguaje no es solo una herramienta de comunicación; también es una forma de construir y reflejar nuestra realidad. Las lenguas tienen géneros gramaticales, y esto puede influir en cómo percibimos ciertos conceptos. Por ejemplo, en alemán, el sol es femenino, mientras que en español es masculino. Este género gramatical puede afectar cómo describimos objetos como un puente, y los adjetivos que usamos pueden estar influenciados por el género gramatical del sustantivo.

Estudios han demostrado que el uso del masculino genérico en el lenguaje puede tener un impacto en la percepción de género de las personas. Las mujeres tienden a puntuar más bajo en cuestionarios de motivación cuando se utiliza el masculino genérico en lugar de un lenguaje más inclusivo. Además, desde la infancia, las profesiones STEM se perciben como «de hombres» cuando no se utiliza un lenguaje inclusivo al hablar de ellas. Es por esto que las empresas tienen una gran responsabilidad a la hora de fomentar un lenguaje y enternos mucho más inclusivos.

Hacia un lenguaje más Inclusivo:

Entonces, ¿cómo podemos adoptar un lenguaje más inclusivo en nuestras empresas?:

  1. Habla de personas: En lugar de «empleados,» usa «personas empleadas» para incluir a todos.
  2. Busca alternativas genéricas: Utiliza términos como «todo el mundo» en lugar de «todos» para ser más inclusivo.
  3. Cambia la forma verbal: Simplifica las frases y evita pronombres innecesarios para lograr un lenguaje más neutro.
  4. No temas desdoblar: En situaciones especiales, puedes utilizar desdoblamientos como «niños y niñas» para ser más inclusivo.
  5. Utiliza @ y x en mensajes informales: En redes sociales o mensajes internos, puedes usar «@tod@s» para incluir a todos los géneros.

Más allá de las palabras:

El lenguaje inclusivo va más allá de las palabras. También incluye la representación en imágenes y considera todos los aspectos de la identidad de una persona, como la raza, la religión, la orientación sexual y la capacidad. Además, implica evitar un lenguaje que refuerce estereotipos o prejuicios. Para lograr una comunicación verdaderamente inclusiva, debemos considerar todos estos aspectos.

Personas implicadas en la inclusión de un lenguaje igualitario

Las personas involucradas en este proceso de cambio pueden incluir:

  1. La alta dirección de la empresa: La adopción de un lenguaje y unas imágenes no sexistas refleja el compromiso de la organización con la igualdad de género y muestra públicamente su alineación con las preocupaciones sociales. La decisión de comprometerse de esta manera recae en el equipo directivo, que debe poner en marcha los procedimientos necesarios.
  2. Las personas encargadas de supervisar el uso no sexista del lenguaje: Estas personas pueden ser designadas por la dirección entre los miembros del personal. A menudo, forman parte de los departamentos de comunicación y recursos humanos de la empresa. Sin embargo, recomendamos que cada departamento cuente con una persona capacitada y responsable de esta revisión.
  3. Todo el personal de la empresa: Cada empleado, a través de sus responsabilidades cotidianas relacionadas con la creación de documentos, herramientas y materiales, debe seguir las recomendaciones de la organización para garantizar el uso de un lenguaje y unas imágenes no sexistas.

El empleo de un lenguaje no sexista representa una manera adicional de promover la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en las empresas. Lo que implica un apoyo global por parte de las empresas.

Métodos de acción.

Sabiendo la importancia que tiene el lenguaje en nuestra cultura y desarrollo empresarial y social, ¿qué medidas puede tomar la organización para llevar a cabo una ambiente mucho más inclusivo e igualitario?

El lenguaje inclusivo es una herramienta poderosa para promover la igualdad de género y la diversidad en las empresas. Adoptar un lenguaje inclusivo no solo refleja un compromiso con la igualdad, sino que también crea un entorno más acogedor y respetuoso para todos. A través de palabras y acciones inclusivas, como el desarrollo de talleres y formaciones que fomenten la sensibilización y formación de los empleados, creación de medidas de buenas prácticas que incluyan una guía de lenguaje inclusivo, son algunos de los ejemplos más usados por nuestros clientes.

Si deseas implementar un lenguaje inclusivo en tu empresa, no dudes en contactar conmigo para obtener orientación y asesoramiento en esta importante tarea.

Llevemos la igualdad de género a la práctica.